sábado, 5 de julio de 2014

Los responsables del descenso


Aclaración: este post es totalmente subjetivo, por lo que puede haber mucho contenido de fanatismo, con poco rigor de investigación.




El descenso a la C, los responsables

Está claro que el descenso no es por una mala campaña o porque hubo mala suerte, sino que es el resultado de varios años haciendo mal las cosas. Desde el nacimiento de éste blog nunca hubo buenas campañas, salvo cuando se jugó la promoción con Independiente Rivadavia, pero que acá no nos consuela la frase "2 minutos más y ascendíamos", no ganamos y nos quedamos en la B. Mientras, que la última temporada fue como darse cuenta de que uno no le prestó mucha atención a su mujer y se da cuenta tarde. No alcanza con ese manotazo de ahogado. Lo de la última fecha es otro detalle más para adornar todo esto, pero no hay que fijarse en eso.

Responsables

La directiva: contratando jugadores viejos, golondrinas, malos, "amigos", experimentos, entre otros. Además de colgar promesas y no vender jugadores que salieron del club cuando fue el momento, prometiéndoles la nada misma. Como así también no tener paciencia con los DTs y llegar a tener 4 en una misma temporada.
Una idea de éste blog, es que muchos anhelaban las epopeyas en la C y que en ésa categoría somos grandes. Bueno, ahi está, estamos en la C.
Ni hablemos de las internas estúpidas y esos aires de grandeza, que solo generan mediocridad y ser un equipito de barrio.

Técnicos: algunos teniendo con qué armar el equipo, hicieron cualquier cosa. Otros ni eso, algunos fueron salvavidas y hubo mucho amiguismo.

Jugadores: algunos que vinieron solamente a retirarse, o porque no los contrataba nadie por estar lesionados, varios "para estar cerca de River", algunos son inexplicables, otros que supuestamente con un nombre importante no hicieron más que "robar" y todas las variables que uno pueda imaginarse.

Hinchas: siendo un equipo de barrio, muchos creen que somos el "Milan de Núñez" y han hecho fotos comparando jugadores del equipo con estrellas europeas. Ni hablemos del idiota que saltó a la cancha pero que lo frenó Fioretto.


Directores Técnicos

2008-2009
Salvador Daniele
Partidos Dirigidos: 45.

2009-2010
Salvador Daniele
Partidos Dirigidos: 15.


Rodolfo Della Picca (incluso 2011)
Partidos Dirigidos: 25.

2011-2012
Rodolfo Della Picca
Partidos Dirigidos: 24.

Guillermo Duró
Partidos Dirigidos: 16.



2012-2013
Guillermo Duró
Partidos Dirigidos: 13.


Pedro Bocca
Partidos Dirigidos: 6.

Juan Amador Sánchez
Partidos Dirigidos: 5.

Oscar Blanco  
Partidos Dirigidos: 13.


2013-2014
Rodolfo Della Picca
Partidos Dirigidos: 40.

Jugadores


Raúl Sanzotti: fue discreto, aunque se mandó algunas.
Albano Anconetani:
de los mejores arqueros de la historia del club.

Hugo Giménez: vino a retirarse y se hizo entrenador de arqueros del club.
Germán Oviedo: promesa que no le dieron chances.
Agustín De Giorgis: de inferiores, estuvo un par de partidos en el banco.
Cristian Moyano: poco y nada.
Gastón Rudnezky: nada de nada. Llegó de Huracán para mostrarse pero nada.
Rodrigo Meza: no jugó. Venía de San Lorenzo.
Leonardo Griffo: alterno buenas y malas, pero no alcanzó.
Lucas Calviño: nivel pobre para un arquero que parecía que daba para más.
Carlos Bangert: vino a rememorar el ascenso al Nacional B pero 10 años después su nivel ya no era el mismo y se retiró.
Cristian Gómez: arquero de inferiores pero no pudo jugar.
Pablo Torresagasti: un gran arquero pero que la pagó por salir mal en un centro que fue gol.
Luis Contreras: de inferiores pero no fue tenido en cuenta.
Juan Gambandé: de gran trayectoria en el ascenso pero no anduvo y se retiró.

Pedro Bocca: no anduvo mal, pero también se retiró en el club y fue el salvavidas como DT.
Alan Giménez: de inferiores que tuvo oportunidades.
Luciano Goux: héroe para la lucha del descenso.
Luis Monge: buen ida y vuelta por su lateral pero flojo en la marca.
Ramiro Fassi: casi que haberse lesionado fue una bendición porque su nivel era malo.

Ceferino Denis: anduvo regular pero no jugó mucho.
Miguel Barbieri: de inferiores, mostró un gran nivel sobre el final del torneo.

Martín Alberich: símbolo, pero que lo dejaron ir cuando había que pelearla.
Leandro Martínez Montagnoli: pilar defensivo para llegar a la promoción con Independiente Rivadavia. Y pensar que no lo tenían en cuenta y se fue a préstamo a JJ Urquiza. Volvió y la rompió.
Maximiliano Nocioni: ni tuvo chances.
Iván Nadal: ídolo, pero por momentos displicente, pero enchufado, sus escaladas eran dignas de una novela griega.
Cristian Lúquez: no hizo mucho.
Gustavo Toranzo: golondrina clásica del ascenso.
David Lencina: llegó de Vélez pero no mostró nada.
Mario Flores: prometía pero se fue a préstamo a JJ Urquiza, volvió fue tenido en cuenta y luego Della Picca lo colgó.
Arturo Villasanti: horrible defensor que hizo 3 o 4 goles seguidos, pero no alcanzó para quedarse.
Javier Lúquez: promesa, buen lateral que lo dejaron irse a FC Tres Algarrobos.

Maximiliano Bogni: llegó para retirarse en el club.
Nicolás Higuaín: el experimento más grande de la historia, a 10 años de retirarse volvió al fútbol. Grandes misterios del fútbol. Solo estuvo un par de veces en el banco.
Jonathan Villalba: llegó por ser hermano de Ricardo Villalba.
Cristian Sierra: no pudo mostrar nada.
Nicolás Tarabini: prometía pero se quedó.
Juan Marcelo Torres Mozzoni: uno de los peores defensores de la historia del club.
Ricardo Villalba: buen defensor de buenos tiros libres. En buen nivel, Daniele se lo llevó a Aldosivi.
Marcelo Marzoratti: no anduvo mal pero pesó ser "hijo de...".
Pablo Batallini: símbolo, gloria, ídolo pero bajó su nivel y se fue a Deportivo Merlo. Su calidad era para jugar en la A pero los dirigentes no lo vendieron cuando estaba arriba de la ola.
Martín Cortés: enganche rápido, chiquito, pura gambeta, pero su juego no era para la 1ra B.
Alejandro Friedrich: un volante de ida y vuelta, que dejó un gran recuerdo pero se fue por una mejor oferta.
Bruno Pezzella: no jugó.
Nahuel Fioretto: llegó y lo expulsaron, volvió y lo expulsaron, se lesionó, frenó al hincha que entró a la cancha y terminó siendo pieza importante para no descender.
Ariel Posat: llegó de Vélez pero fue intrascendente.
Agustín Campomar: típico caso de futura golondrina del ascenso.

Ramiro López: no mostró todo su potencial y anduvo lesionado.
Rodrigo Platero: LA promesa, que lo quería River y se fue a probar a Italia pero por problemas de cupo de extranjeros no se pudo quedar. Volvió y fue colgado.
Emiliano Esquivel: no se pudo mostrar.
Juan Pablo Rocchi: golondrina.
Leandro Luppino: trotamundos, coleccionista de clubes que le faltaba pasar por acá pero su nivel fue bajo.
Raúl Ruiz: enganche clásico del ascenso pero no anduvo.
Maximiliano Sosa: no pudo mostrar nada.
Maximiliano Serrano: aguantó, lo aguantaron, y terminó rompiéndola luego de pelearla muchos años.
Mariano Tríbulo: un nombre importante del ascenso que no anduvo.
Pablo Wittwer: no jugó prácticamente.
Bruno Pezzella: no jugó.
Gastón Barbosa: no tuvo oportunidades.
Hernán Asim: nada de nada.
Alejandro González: intrascendente.
Franco Sosa: no debutó.
Germán Libramento: incomprensible su incorporación.
Arnaldo González: gran volante, que cumplió y se fue a Santamarina.
Cristian Lillo: intrascendente.
Ezequiel Messina: no debutó.
Gonzalo Olid Apaza: poco e intrascendente. Creían que se traía a un futura estrella pero a veces, el Football Manager engaña.
Juan Manuel Sosa: dueño del mediocampo y salvaba las equivocaciones de Porcel.
Gonzalo Ludueña: otro más que vino a robar, que vino por el apellido pero fue un paquete.
Brian Noguera: sin oportunidades para otra promesa incumplida.
Ariel Ortega: vino a dar lástima, mal físicamente y mal entrenado.
Maximiliano Rodríguez: apenas pudo jugar en una Copa Argentina, prometía y lo dejaron libre.
Gonzalo Ritacco: promesa que no logró consolidarse.
Fernando Aguirre: solamente fue parte de un plantel.

Gastón Ada:
nada de nada, pero se fue a Morón y parece que se acordó de jugar.
Rodrigo Ada: supuesta promesa pero no se mostró.
Marcelo Peruggini: poco compromiso.
Martín Olmedo: no jugó.

Gustavo Arce:
incomprensible su incorporación. Gordo, grande y lento.
Jacobo Mansilla: un enganche exquisito que terminó yéndose a Quilmes.
Miguel Porcel: el clásico caso de un jugador grande, fuera de estado físico y pura rusticidad. Incomprensible como fue titular.
Jorge Correa: llegó gordo de Vélez, apenas jugó, anduvo lesionado, se fue y 6 meses después era fundamental para el club de Liniers. Un milagro del fútbol.
Pablo González: apenas un par de partidos como suplente y no pudo mostrar su talento.
Santiago Sommariva: clave en el mediocampo, un jugadorazo pero que no quiso quedarse.
Luciano González: un motorcito pero no pudo quedarse.
Nicolás Castro: uno de los tantos que llegó de River, pero no hizo nada.

Martín Ascensio: enganche que llegó para "estar cerca de River". No jugó bien.
Jonathan Villalba: llegó de River gracias a su hermano Ricardo. Nada de nada.
Maximiliano Zanello: un jugador con clase pero la categoría lo comió.
Juan Amieva: otra promesa, que apenas jugó y se fue a Bélgica.
Cristian Bustos: Poco para alguien con su calidad.
Jorge Daolio: enganche clásico del ascenso pero que no rindió, se fue mal con todos y al volver con San Telmo le gritó un gol a la hinchada.
Lucas Colitto: promesa, un poco livianito pero con mucha calidad. Se fue al Arouca.

Luciano Cipriani: otro caso clásico de jugador golondrina.
Sergio Comba: vino a repetir lo que había hecho en el Nacional B pero ya no era el mismo.
Josuke Kato: el japonés apenas jugaba en Huracán y en el club creyeron que podía repetir las epopeyas de Kijima Ryosuke, pero anduvo lesionado.
Martín Minadevino: gran volante de ida y vuelta, de los pocos que zafan.
Emiliano Abalos Calderón: promesa pero no tuvo lugar.
Franco Parodi: todos esperaban los goles de esta promesa pero apenas jugó. Anduvo por Portugal y Rusia, volvió, estuvo mucho tiempo lesionado y no fue tenido en cuenta.
Gonzalo Vivanco: golondrina con pocos goles.
Eduardo López Grassi: no jugó.
Federico Maraschi: el goleador de Almirante no hizo nada.
Gabriel Díaz: golondrina del ascenso.
Gabriel Pereyra: el ídolo que llegó para ayudar pero su nivel fue bajo y se retiró.
Alejandro Noriega: goleador del ascenso pero su nivel fue pobrísimo.
Ezequiel Lazo: intrascendente.
Gastón Casas: vino por el nombre, porque estaba lesionado. Hizo algún gol pero dio lástima.

Federico Guasch: promesa que de un día para el otro bajaron a la 4ta.
Marcos Ovejero: dio pena.
Jonathan Páez: un buen 5 que cumplió.
Martín Batallini: livianito, daba la sensación de que estaba en el club por ser hermano de Pablo.
Mauro Conocchiari: la rompió en Morón, vino con esos antecedentes, que no pudo mostrarlos y tuvo varias lesiones.
Carlos Santibáñez: se la pasó lesionado y lo poco que jugó, lo hizo mal.

Javier Molina: la rompió y Daniele se lo llevó a Aldosivi.
Maximiliano Ceratto: sus gambetas en velocidad hicieron que se vaya a Chile. Jugadorazo.
Juan Lapietra: una vergüenza.
Andrés Aparicio: uruguayo luchador, barullero y bartolero.
Albano Becica: buen rendimiento y varios goles de tiro libre.
Alejandro García: promesa de la C pero en la B no anduvo.
Daniel Giménez: volvió para rememorar viejas epopeyas y cumplió.
Andrés Montenegro: la rompió, hizo muchos goles.
Emiliano Villalba: no jugó.
Carlos Perrona: promesa de gol pero no anduvo.
Diego Coria: buen goleador y corredor.
Fernando Cobián: peleador y varios goles.
Ronald Moreno: no jugó.
Andrés Guzmán: no tuvo un mal desempeño, hizo goles pero se fue enseguida.
Mateo Martinelli: poco.
Joaquín Meza López: solamente en el banco en una Copa Argentina.
Jonathan Ceratto: vino por ser el hermano de Maxi porque su nivel fue malo.
Leonardo Roda: poco, no mostró nada de lo que venía haciendo.
Rodrigo Canario: poquito.
Luciano Lo Bianco: vino a robar, directamente.
Martín Rocchi: no jugó.
Leonardo Romero: nivel bajo, no mostró todas sus condiciones.

Lautaro Schinnea: no debutó.
Jonathan Tridente: goles importantes.

Ezequiel Aguirre: corredor al pedo.
Pablo Bueno: poco y sin embargo volvió a Defensa para jugar en la A.

Gastón Grecco: el gran goleador de la B tuvo un nivel pobre y apenas hizo goles.
Christian Vergara: exasperante con su displicencia y poco compromismo hasta que se lesionó y no jugó más.

Esperemos que ascendamos pronto y no quedarnos 20 años en la C.

Agradecimientos a Historiales del Dragón